Adiestrar a tu perro American Stanford

Adiestrar a tu perro American Stanford

La dulzura universal del American Stanford

Si buscas un compañero canino que sea el equilibrio perfecto entre un compañero de aventuras y un perro faldero, no puedes equivocarte con el Cachorro Stanford Americano.

Esta raza existe desde hace más de 80 años y su popularidad sigue creciendo por todos los rasgos que la convierten en uno de los mejores compañeros caninos que puedas pedir.

Veamos con más detalle por qué el Cachorro Stanford Americano es un encanto en todos los sentidos.

 

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Historia y reconocimiento

El American Stanford Terrier es una raza muy vinculada a Estados Unidos. Criado inicialmente a partir de terriers ingleses, el American Stanford fue reconocido por primera vez como raza por el American Kennel Club (AKC) en 1936.

Más tarde, el AKC volvería a reclasificarlo en 1972 como «American Staffordshire Terrier», para distinguirlo de razas similares de otros países.

Desde entonces, el cachorro Stanford americano ha crecido hasta convertirse en una de las razas más populares y queridas del país.

Personalidad

El cachorro Stanford americano es un perro todoterreno y un excelente compañero familiar, con un fuerte instinto protector y un carácter muy leal.

Son despiertos y enérgicos, lo que significa que siempre están listos para la aventura, pero también serán igual de felices acurrucándose en tu regazo al final del día.

Esta raza es famosa por su paciencia y dulzura con los niños, lo que la convierte en la raza perfecta para una familia.

Características y aspecto

El cachorro American Stanford es un cachorro de tamaño mediano, que pesa entre 4,5 y 6,5 kg y mide entre 17 y 19 pulgadas a la altura del hombro.

Esta raza suele tener un aspecto musculoso y corpulento, con una cabeza ancha y poderosa.

Su mandíbula también es muy poderosa, lo que le confiere las características mejillas llenas.

Suelen tener un pelaje corto y brillante que se presenta en una gran variedad de colores, aunque todos suelen ser atigrados o de color fuego.

Salud y cuidados

Esta raza es ampliamente conocida por su robusta salud, y sólo en raras ocasiones sufre trastornos hereditarios u otros problemas de salud.

Es importante que el cachorro American Stanford haga suficiente ejercicio para mantenerse sano y en forma, con paseos regulares que ayuden a mantener sanas las articulaciones y los músculos.

Esta raza también necesita cepillados regulares para mantener su pelaje corto, así como tratamientos regulares contra pulgas y garrapatas.

Comprar un cachorro American Stanford

Si quieres añadir un cachorro American Stanford a tu hogar, es importante que acudas a un criador responsable.

También merece la pena considerar la adopción de mascotas: muchos centros de rescate tienen cachorros American Stanford en busca de un hogar cariñoso.

Es importante que investigues para asegurarte de que adquieres un cachorro sano y de que comprendes el grado de responsabilidad que conlleva la tenencia de un perro.

En general

Es evidente por qué el cachorro American Stanford se ha convertido en una raza tan popular.

Son grandes compañeros de familia y destacan tanto como compañeros de aventuras como perros falderos.

Con su naturaleza protectora, su personalidad amable y su salud robusta, el cachorro American Stanford es uno de los cachorros más completos que existen.

Te recomiendo

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¿Te gusta la raza de los American Stanford?

…antes de comprar uno conoce su carácter y como puedes adiestrarlo.

El American Stanford es un perro fuerte a pesar de su mediano tamaño, consta de buenos músculos y una mandíbula de gran agarre.

Suele ser un perro un poco tímido con los extraños, leal y protector con los niños. Sin embargo, por sus características físicas se le considera un animal peligroso, por ello se recomienda colocarle siempre un bozal.



Cuándo empezar a educar a un American Stanford

Se puede empezar a educarlo desde la séptima semana de vida, hasta cumplir el año cuando ya alcanza la adultez. A partir del cuarto mes se puede ser más estricto en la educación del cachorro.

Lo ideal es que el primer encuentro con tu perro sea positivo y no ser demasiado consentidor, ni permisivo con tu mascota desde pequeños.

Recuerda que es casi como un niño, si le das demasiada libertad después no podrás controlarlo.



Establece reglas:

Establecer reglas claras y simples desde el principio desde no subirse al sofá, o jugar con los zapato o la ropa.

La idea es crear un sano vinculo con tu perro, donde él entienda cuáles son las normas que debe seguir y te respete como jefe de la casa.

Corrige las malas conductas

No necesitas maltratar a tu cachorro para corregirlo, pero sí establecer los límites a su comportamiento. Tan pronto como su conducta empiece a desvirtuarse.

Un simple no o una llamada de atención alto y fuerte es generalmente más que suficiente.

Trata de emplear el reforzamiento de conductas positivas dándole un premio.



Enséñale órdenes básicas primero:

Aunque el American Stanford se caracteriza por ser un perro sociable, hay que educarlo para que no sea huraño con las visitas, ni con otras mascotas.

Para ello es importante que desde pequeño le enseñes órdenes básicas que lo hagan sentir útil y parte de la familia. Asimismo, dejarlo desde pequeño cerca de las visitas u otras mascotas para que socialice y se vaya acostumbrando poco a poco.

Órdenes más complejas:

Cuando tu perro American Stanford tenga aprendidas sus órdenes básicas, puedes enseñarle poco a poco órdenes más complejas, ayudándolo a distinguir entre unas y otras para que las recuerde.

Puedes enseñarle ejercicios que le ayuden a desarrollar su agilidad y le ayuden a mantenerse sano.

Algunos ejemplos son saltar una barda, girar, caminar en dos patas, entre otros ejercicios y rutinas, que además le ayudaran a ser mas obedientes.



Inscribe a tu American stanford en una competencia:

Si estás en la posibilidad y considerar que puedes entrenar bien a tu perro, puedes inscribirlo en alguna competencia.

Este tipo de deporte canino es llamado agility y es muy popular en muchos países.

Llegando a tener su propio reglamento internacional.

Un perro bien educado será una gran compañía y alegría para la familia.

Depende de ti enseñarle a tu perro American Stanford las normas de la casa, a comportarse adecuadamente, a conocer la jerarquía del hogar, respetar el orden y a integrarse en el rol que se le ha dado.

Imagen cortesía de (pixabay.com), CC0 Creative Commons