Ser educado merece un premio

Es una obligación para cualquier dueño enseñar a su mascota  las normas básicas de comportamiento. Siempre hacerlo con cariño, mediante juegos, paseos, caricias o plabras suaves, dejando los castigos para casos extremos, y nunca jamás usando el maltrato ni la violencia.

Por otro lado, sabemos que cuando perro se comporta tal y como deseamos, y conseguimos que aprenda una norma, debemos recompensar su esfuerzo. Sin embargo también el momento de premiar a nuestro perro debemos hacerlo bien. No vale cualquier recompensa.

Perros buenos y recompensas

Nuestro perro nos hace tan feliz que deseamos hacerle feliz a él y le ofrecemos un exceso de premios y regalos. A veces sucede. Pero tengamos en cuenta el valor de cuidar su salud.

Los alimentos son un gran aliado a la hora de educar a una mascota. Y hay que saber cuándo y cómo les corresponde recibirlos.

1. Cuando le enseñes pautas de comportamiento, ten a mano los aperitivos o golosinas que más les gusten. Ofrécela justo en el momento en que te obedezca. Sólo así entenderá el motivo.

2. Alterna las recompensas de comida con juegos y paseos. Así, además de sentirse querido, estarás provocando que haga ejercicio, lo cual es bueno para su salud, y le ayuda a bajar las calorías de las golosinas.

3. No le des golosinas cuando se porte mal.

4. En el mercado existen muchas golosinas para perros.  Elige la que sea mejor para él y para su salud. Procura no abusar de aquéllas que provoquen sobrepeso y raciónalas como un regalo para las ocasiones especiales.