Si tenemos perros, deberemos encargarnos de prestar especial cuidado a sus hábitos alimenticios, y sobre todo, que puedan aparcar a un lado el estrés a la hora de “sentarse a la mesa”. Y es que la dilatación gástrica, es un tipo de indigestión que puede causar la muerte de hasta un 30 por ciento de los perros que la sufren, por lo que se trata de un problema delicado, al que deberemos prestar mucha atención para cuidar la salud de nuestro cachorrito.
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La dilatación gástrica es una enfermedad aguda que se presenta principalmente en perros, y es muy común entre los cachorros. Es muy grave, y puede costarle la vida en cuestión de tan sólo unas horas.
Comer demasiado o hacerlo deprisa, beber en exceso junto a la comida son algunas de los hábitos que puede provocar la dilatación gástrica.
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Qué es la dilatación gástrica
Este trastorno está provocado por la acumulación de gases, que favorecen que el estómago se dilate, hasta tal punto que los ligamentos que lo fijan no lo sujetan y el peso del bazo, pegado al estómago, produce el giro del intestino. Las consecuencias, son un colapso del riego sanguíneo. Los síntomas son dolor e inflamación del abdomen, el animal intenta vomitar o expulsa saliva espumosa, y además, está inquieto y rascando el suelo.
Suele afectar más a perros de tamaño grande y pecho profundo, tipo pastor alemán, doberman, galgos.
Para evitar que tu cachorrito sufra este problema, es necesario evitar que coma antes de irse a dormir, ni antes ni después de hacer ejercicio. También es peligroso el ayuno previo si va a viajar.
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