Muchas veces los gatos tienen comportamientos que pueden sorprendernos o divertirnos. Incluso en ocasiones, los felinos domésticos pueden tener hábitos que a primera vista parecen incomprensibles. Sin embargo, en general muchos de los hábitos de los gatos tienen su razón de ser en su naturaleza felina. Y por supuesto, en los instintos de cazadores que aún sobreviven a pesar de que son animales domésticos. En este post te contamos acerca de la razón de algunos de estos hábitos sorprendentes de nuestros mininos.
Hábitos de los gatos en casa
Si bien cada gato puede tener su propia personalidad y costumbres, también es cierto que los felinos domésticos comparten ciertos comportamientos. Si has tenido un gato en casa alguna vez, es muy probable que hayas notado que no les gusta tener puertas cerradas y que aman colocarse en sitios elevados. Son hábitos de los gatos en casa que tienen su explicación y te lo contamos aquí.
1. Puertas abiertas
Muchos gatos quieren que las puertas de la casa estén abiertas. Pueden maullar hasta que las abran, pero no necesariamente querrán salir. De lo que se trata es que un gato puede percibir una puerta cerrada como una disminución a su territorio. Otras causas pueden ser para llamar la atención o simplemente para saber qué hay detrás. Es decir, para satisfacer su naturaleza curiosa.
2. Lugares elevados
Uno de los hábitos de los gatos más extendidos es subirse a lugares elevados. Suelen buscar la altura subiéndose a cualquier mueble que haya en casa. La intención gatuna en este caso es una manera tanto de controlar como de explorar el territorio. Por eso tu gato será feliz con un accesorio que le permita elevarse a diferentes alturas.
3. Cambios de humor
Los gatos en ocasiones suelen tener aparentes cambios de humor. En realidad, de lo que se trata es que no suelen ser muy tolerantes a las caricias. Por eso a veces se ganan fama de ariscos, aunque simplemente está en su naturaleza el que no les guste demasiado que los manipulen.
4. Buscar el calor
Los gatos suelen acercarse a cualquier sitio en que haya cerca una fuente de calor. Por eso se los ve frecuentemente cerca de los ordenadores o cualquier sitio que esté caliente. Algunos científicos aseguran que la explicación viene de un antiguo ancestro de los gatos que tenía alta tolerancia a las temperaturas más elevadas.
5. Pedir comida siempre
Aunque tengan el plato lleno, los mininos suelen seguir pidiendo comida. En ocasiones, esto puede parecer una especie de obsesión de ver el plato lleno. Pero la realidad es que los gatos tienen necesidades alimenticias que implican la caza de cinco o seis piezas diarias.
De hecho, su sistema digestivo está diseñado para comer pequeñas cantidades varias veces al día. Cuando un gato es domesticado, el instinto se activa y pide comida a su proveedor, en este caso, la persona que lo alimenta.
6. Jugar en la noche
Los gatos, a pesar de ser animales domésticos, poseen una parte de su naturaleza que es la de cazador nocturno. Por eso suelen dormir durante el día y activarse en la noche
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