La vida de los animales de granja, desde que nacen, se ha orientado para un fin. Los seres humanos los vemos y tratamos como si fueran productos con los que comercializar, y no como seres vivos que sienten frío, hambre, alegría y tristeza.
Es a partir de esta trata, que se han creado los santuarios de animales, lugares que rescatan y acogen a estos animales que han sufrido lo inimaginable.
Los animales en las granjas viven en situaciones precarias, en espacios muy reducidos donde
están hacinados, con una vida mecanizada, en la que mientras que el animal esté vivo ha de ser explotado para que nos genere beneficios.
Un buen ejemplo de ello son las gallinas; las tiene en hileras unas al lado de otras con luz las 24 horas para que produzcan más huevos, alimentadas con pienso enriquecido con hormonas para que crezcan más rápido… Y cuando ya no nos sirven, se vende su carne para formar parte de nuestra dieta.
Qué son los santuarios de animales
Es a raíz de toda esta práctica de la industria, principalmente alimentaria, que aparecen los santuarios de animales…
Se trata de lugares habilitados para acoger a estos animales y que vivan en un entorno agradable que puedan ver y sentir como su hogar.
No son refugios donde se espera que sean adoptados, sino un lugar en el que estos animales puedan vivir libres y se recuperen del estilo de vida que llevaban.
Pero no solo se trata de lugares en los que acogen y ofrecen una vida digna a animales que ha sido explotados, maltratados y humillados; sino que estos santuarios buscan también concienciarnos y educarnos desde la distancia, ya que no son zoológicos que exponen los animales a los humanos.
Todo el que quiera ver cómo es la vida de estos pequeños, pueden hacerse voluntarios o colaborar con ellos en la medida que les sea posible.
La filosofía que tienen estos santuarios de animales es “humanos y no humanos tienen la misma
importancia”. Y en base a esa filosofía construyen lugares en los que todos los seres vivos tienen los mismos derechos.
Hablamos principalmente de animales de granja. Y es que son muchos los animales rescatados de la cruel industria alimentaria que han pasado por lo insufrible. Pero no solo acogen animales de granja, sino todo tipos de animales que puedan vivir juntos y en armonía.
En los santuarios de animales luchan por su libertad, integridad y por sus derechos con la convicción de que su trabajo contribuye a crear un mundo mejor en el que tanto los animales como nosotros seamos felices. Y lo cierto, es que su labor hace de este mundo un mundo mejor.
¿Conocías los santuarios de animales?
