Periodontitis felina: cómo prevenirla

Existen diversas enfermedades que pueden afectar significativamente el bienestar de los mininos, y la periodontitis felina es una de ellas. La periodontitis es el problema bucodental más común en los gatos, presentándose en un 80% de la población adulta gatuna y siendo la principal causa de la perdida de dientes.

La presencia de la periodontitis felina en el animal puede ocasionar desde la recesión de las encías, daño a los nervios hasta la perdida de dientes, en los casos más avanzados, es capaz de afectar al corazón, los riñones y el hígado, y provocar la muerte del individuo. Por estos motivos, tratarla desde su fase temprana es primordial, siendo la periodontitis felina: cómo prevenirla el tema de mayor interés para los dueños de gatos en lo que respecta a salud bucodental.

¿Qué es la periodontitis felina?

La periodontitis felina es la inflamación de las estructuras de soporte del diente y del hueso, que combinada con la gingivitis se denomina enfermedad periodontal. Como se menciona al principio, el avance de esta enfermedad es silencioso hasta que provoca un daño notorio en las encías y empieza a mostrar finalmente síntomas perceptibles para la persona.

La manera en que se desarrolla consiste en varias fases, primero comienza cuando las bacterias forman placa en los dientes y luego, al combinarse con la saliva, empieza a formarse el sarro; una vez que este estado se establece, las bacterias entran debajo de las encías y provocan la gingivitis, y después de un cierto tiempo empiezan a destruir el tejido de soporte de los dientes, siendo esta fase conocida como periodontitis.

Síntomas de la periodontitis felina

En su fase temprana la periodontitis no presenta ningún síntoma externo, y el mayor indicio de su formación es la presencia de placa, sarro o encías inflamadas. Pero una vez que empieza a avanzar, se hacen visibles los siguientes síntomas:

  • Mal aliento.
  • Enrojecimiento o sangrado de las encías.
  • Babeo, que puede además estar acompañado de sangre.
  • Intentos constantes de tocarse la boca o meter la pata dentro de ella.
  • Dificultad para masticar.
  • Dientes flojos o faltantes.
  • Hinchazón en la boca o cara.
  • Recesión de las encías.
  • Secreción nasal.

Prevención y tratamiento de la periodontitis felina

El tratamiento de la periodontitis en gatos varía según la gravedad de esta, en los casos leves basta con una limpieza y un control constante sobre los dientes del minino; a medida que se agrava, se empiezan a necesitar antibióticos, intervenciones quirúrgicas y extracción de dientes. En los casos donde las bacterias logran viajar hasta el corazón, los riñones o el hígado, se necesita también una atención especializada de dichos órganos. Los análisis y tratamientos necesitan ser siempre realizados con un veterinario de confianza.

La prevención de la periodontitis felina recae en su totalidad en el cuidado bucodental del gato, lo que es responsabilidad del dueño. El cuidado de sus dientes incluye cepillados, uso de productos diseñados específicamente para este fin como el enjuague bucal para gatos, una alimentación que ayude a evitar la formación de placas o sarro y visitas periódicas al veterinario.

La mejor forma de tratar la periodontitis es previniéndola, por lo que los chequeos constantes por parte de la persona buscando anomalías en la boca del animal y la aplicación rutinaria de limpieza dental es fundamental para el bienestar del minino.