Los ladridos de un perro, por muy mascota nuestra que sea, pueden resultarnos molestos. Sin embargo, cuando un perro ladra, casi siempre tiene un buen motivo para hacerlo. Y es que el ladrido es el lenguaje que tiene el perro, junto al corporal, que tienen los perros para comunicarse con otros animales, ya sean perros, humanos o de otra especie.
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Rompiendo mitos
Aunque los perros cuando ladran pueden asustarnos y, enseguida pensamos que por ladrar son animales, nada más lejos de la realidad. Como un bebé cuando llora, el ladrido del perro nos avisa de algo que ocurre. El significado puede ir desde que desea llamar la atención, avisarnos para indicarnos que hay algún extraño cerca, y también puede ladrar para decirnos que quiere jugar o que tiene hambre.
Tipos de ladrido
Un ladrido puede ser territorial si es fuerte y repetitivo. De aviso, si es grave y espaciado. O de miedo, si a la vez que ladra, se retira hacia atrás.
Si tu perro estira las patas delanteras y se pone a ladrar, es que quiere jugar contigo. Si su ladrido es insistente, agudo y repetitivo, puede ser que algo le pase y quiere llamar tu atención.
También puede ladrar de frustración, por ejemplo, cuando se siente solo.
