El primer día de tu cachorro: dónde debe dormir

 Tener especial cuidado en el día de separación del cachorro de su madre es fundamental para determinar futuros comportamientos  y conductas. Por ello, el primer día del cachorro en una casa supone un cambio radical en lo que el pequeño conoce hasta el momento, y por ello, conviene desde el principio establecer normas.



Primeramente, el lugar donde dormirá de ahora en adelante, puede ser una cama especial o incluso una caja acondicionada, donde disponga suficiente espacio para su tamaño y donde la ventilación sea buena y suficiente. Si el primer día se le permite dormir en un sofá, una cama u otro lugar fuera de su cama, ya nunca se acostumbrará a usar su espacio.

La noche: el momento clave

Los cachorros suelen dormir bastante, y varias veces al día, cuando apenas tienen semanas de vida. Son muy juguetones pero se cansan rápidamente, por lo que cada vez que vayan a dormir, es necesario que lo hagan en sus cajas o camas. En la noche es cuando suelen extrañar más, y llorar al quedarse solos, pero si se les acostumbra a acostarse en su lugar durante el día, es más probable que no den problemas en la noche.

En el caso de que el cachorro llore durante la noche se le puede entretener con determinados trucos, como con un reloj cuyas agujas suenen dentro de su caja, o colocando una manta eléctrica sobre él, u otro elemento que le produzca calor.

La cocina es un buen lugar

En cuanto al lugar donde ubicar la cama de nuestro cachorro, la cocina es el mejor sitio, puesto que generalmente no hay otros muebles donde puedan subir. Además, suele ser un lugar con bastante vida en las casas y con limpieza para evitar infecciones.

Aunque a veces es duro dejar al cachorro que llore, si se es estricto con las normas, el cachorro aprenderá rápidamente que este es su lugar de descanso y rápidamente lo aceptará como tal.

Cristina Bonillo