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Los gatitos recién nacidos son encantadores, preciosos y se nos cae la baba con ellos. Es una maravilla tener un cachorro en casa, una nueva vida que despierta nos hace sentir tan responsables, es tan enternecedor que a veces se nos olvida que requieren grandes cuidados.
La alimentación
Cualquiera diría que dar de comer a nuestro nuevo gatito es sencillo, basta con un biberón. Pero los que dicen esto nunca han tenido que cuidar de un cachorro de gato.
Para empezar no se les da un biberón, sino jeringuillas en las que mediremos la dosis diaria para poder controlar su alimentación, el tiempo entre tomas y el aumento de peso.
Además, a un gatito pequeño no podemos darle simple leche de vaca, hay que conseguir que sea nutritiva sin dañar su pequeño sistema digestivo.
Lo ideal es conseguir leche maternizada felina, pero algunas veces puede ser difícil y hay recetas caseras para conseguir mezclas que puedan alimentar y cuidar de nuestro cachorro de gato sin producirle dolor de estómago.
La guarida
Todos los mamíferos necesitamos sentirnos seguros en algún sitio, y los gatitos pequeños no son una excepción.
La simple lógica nos dice que necesitan un lugar seco, protegido de las corrientes de aire, cálido y con alguna pequeña manta o ropa de algodón para que puedan adaptarla a su medida. Si los cachorros son muy pequeños también habrá que colocar alguna fuente de calor.
Colocar la fuente de calor adecuadamente puede ser complicado y hay que asegurarse de que los mantiene calientes sin producirles daños o quemar la casa.
Lo más recomendable es el agua caliente. Colocando una bolsa de agua caliente debajo de su caja o “cuna” los mantendremos calientes como si estuvieran encima de un suelo radiante. También se puede utilizar una lámpara con una bombilla que proyecte calor sobre su lugar de descanso, pero tiene que ser la adecuada y tiene que estar bien colocada.
Asistencia sanitaria sobre cómo cuidar un cachorro de gato
Lo más recomendable es elegir un veterinario cerca de nuestro lugar de residencia y acudir siempre al mismo. Nuestro gatito se familiarizará con él y hasta puede que se hagan amigos, lo que facilitará mucho las cosas.
Un veterinario competente nos indicará cuál es la mejor edad para comenzar con las vacunas, pero se recomienda ampliamente comenzar después del destete. El calendario posterior depende de nosotros, aunque el veterinario nos hará sugerencias que ayudarán a que nuestro cachorro crezca fuerte y sano.
Imagen cortesía de fotosdepara.com
