Un perro deprimido después de vacaciones es bastante habitual de observar. Piensa que estuvo en la playa o en la montaña o en el lugar hermoso que escogiste para viajar junto a él y, de repente, vuelve a su casa sin tanta naturaleza, sin sus nuevos amigos canes y se siente deprimido.
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Las vacaciones en familia
Así como los humanos nos acostumbramos a todo, a lo bueno y a lo malo, los perros también lo hacen y quizás con diferentes tiempos a los tuyos. Las vacaciones en familia son increíblemente beneficiosas para los amigos fieles pero también producen desequilibrios cuando retornan a sus hogares. Son muy pocos los perros que no sufren las consecuencias pero no debes alarmarte sino dejar que haga su “duelo”. Piensa que de estar quizás en una playa, con la arenita templada y las olas del mar, buscando amigos de su misma especie, ahora está en un apartamento cerrado o quizás con la suerte de permanecer en una casa con parque pero solo.
Cómo evitar que se deprima
Si bien no puedes estar de vacaciones de por vida para que tu perrito esté feliz, sí podrás evitar que se sienta decaído. Cómo evitar que se deprima será lo que tendrás que ir descubriendo junto a él ya que todos los animales no son iguales ni reaccionan de la misma manera frente a un estímulo. Una posibilidad es que aumentes los paseos diarios y vayan a parques o lugares donde haya más perritos así puede jugar junto a ellos. No permitas que esté solo y se sienta mal. Es bueno sí que tenga su espacio para tener intimidad pero si se te ocurren salidas en que podría pasarla muy bien, fíjate de proponérselas y seguro agarrará viaje al instante.
El humano que proyecta en su perro
Es bastante habitual ver cómo el humano que proyecta en su perro es porque no asume que son dos razas diferentes e incluso a veces opuestas. Una cosa es ser una persona y otra ser una animal, pero no quiere decir que la persona sea superior a su perro sino que son diferentes. Si amas a tus animales seguramente sentirás que el especismo no tiene lugar en tu vida y quizás incluso hasta adores más a tus mascotas (a las que no sientes como tales sino compañeros de la vida) que a determinadas personas. Dedícale tiempo a tu perro, cuídalo y busquen maneras de convivir felices.
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