Cuidado Gatos

Cómo bañar a tu gato

En general, las mascotas felinas suelen ser extremadamente aseadas y no es necesario bañarlas. Pero en ocasiones necesitarás bañar a tu gato y es bueno saber cómo hacerlo para que se trate de una experiencia al menos llevadera. Esto, en caso de que tu gato se ensucie mucho o que entre en contacto con alguna sustancia que haga necesario tener que limpiarlo. ¡Toma en cuenta las recomendaciones!

Consejos para bañar a tu gato

Es posible que no sea un placer bañar a tu gato, pero al menos podría ser no tan molesto si sigues estas indicaciones. 

  • Coloca una alfombra, toalla o tapete antirresbalante en el piso. Encima coloca una tina, que será donde bañarás a tu gato
  • Llena la tina con agua caliente a un nivel no demasiado profundo. Si le pones mucha agua, podrás asustar a tu gato. Además podría derramarse el agua.
  • Usa un champú especial que no contenga perfumes ni sustancias químicas. Evita el uso del champú para humanos, ya que este no es adecuado al PH de los gatos
  • Coloca al felino en la tina y aplica una pequeña cantidad de champú. Evita la zona de los ojos y de las orejas. Será más fácil si te dedicas a lavar una parte específica del cuerpo del gato que lavarlo todo. Si es necesario lavarlo completo, coloca champú en todo el cuerpo
  • Es posible que sea más fácil aplicarle el champú si lo colocas fuera de la tina y pones al gato sobre la toalla
  • Luego de que el jabón haya actuado, tendrás que enjuagarlo. Para eso puedes usar una jarra de agua templada. Nuevamente, evita el área de los ojos y las orejas
  • Seca al gato en una habitación cálida y no lo dejes salir hasta que esté bien seco. En general, los gatos suelen sacudirse el exceso de agua. Luego de eso, sigue secándolo hasta quitar cualquier rastro de humedad
  • A menos que esté acostumbrado al ruido desde muy pequeño, no se recomienda el uso de la secadora de pelo. El ruido puede molestarlo mucho
  • Si observas que tu gato sufre mucho con el baño e intenta morderte o arañar, no insistas. En este caso y de ser necesario, puedes llevarlo al veterinario para que lo aseen de manera profesional. 

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