Los perros pueden escuchar mucho más que los humanos. En consecuencia, un ruido que para nosotros es tan solo molesto, para ellos puede ser una verdadera pesadilla. Por eso, es necesario estar al tanto cómo se puede calmar la ansiedad canina en estos casos, para facilitarles el mal trago a nuestros parientes de cuatro patas.
No todos los perros reaccionan mal ante los fuegos artificiales o los truenos durante una tormenta eléctrica. Pero los que si se ven afectados por estos ruidos, pueden volverse realmente locos, y tienden a salir corriendo y terminar lejos de sus hogares. Si desafortunadamente tu mascota sufre de estos problemas, estas son las formas en que puedes ayudarlo.
Provéele de un lugar seguro
Que tu perro se quede en el patio bajo circunstancias que lo aterrorizan es una fuente de peligros para él. En el intento por escaparse puede romper objetos y lastimarse. Por eso déjalo entrar en la casa y observa en qué lugar se siente más a gusto.
Si debajo de una mesa o de una cama se calma, proporciónale una manta o su juguete favorito para que se quede allí, hasta que todo pase. También prueba dejándolo en su jaula o transportín, o en una habitación que prefiera y que le permita quedarse en calma.
Otros sonidos para calmar la ansiedad canina
En algunos casos los perros se pueden distraer con sonidos más agradables y armoniosos. Por ejemplo, prueba poniendo música con el volumen alto en tu equipo de sonido. También puedes poner la televisión, o una película en el reproductor de video.
Solo procura que no llegue a decibeles demasiado altos, que pueden afectar su audición y también la tuya.
Terapia de desensibilización
Los expertos aseguran que los perros pueden acostumbrarse a estos ruidos, si se los hace escuchar con frecuencia. Mediante paciencia y persistencia, se les puede enseñar que a pesar de que sean molestos, no significan ningún peligro.
Para esto busca sonidos de fuegos artificiales o truenos, que se puede bajar fácilmente por Internet. Luego haz que los escuche una vez al día en tu equipo de música. Su primera reacción será huir. Procura que se quede y que se calme. Quédate con él para que sepa que todo está bien. Con el tiempo se acostumbrará y no tendrá crisis cuando esto vuelva a suceder.
Dispositivos de ayuda
También puedes recurrir a dispositivos creados específicamente para ayudar en estos casos tales como collares calmantes o camisas protectoras. Bien empleadas pueden ser un factor que los ayuda a controlar este comportamiento indeseable. No obstante, para no cometer errores consulta a un experto en conducta canina, quien puede asesorarte sobre cómo usarlos apropiadamente.
Medicación
Otra forma de controlar la ansiedad canina, en estas situaciones es mediante medicación que pueda calmar su comportamiento en estas circunstancias. Esta se obtiene mediante una consulta al veterinario, quien va a recetar la más adecuada para tu perro de acuerdo a factores como edad, tamaño y niveles de nerviosismo que es capaz de manifestar.
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