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La comunicación y entendimiento entre diferentes especies animales es una tarea complicada pero de suma necesidad para el día a día, en especial cuando se trata de la relación humano- mascota. Los perros, aunque no puedan hablar, poseen un sinfín de gestos y comportamientos para expresar lo que sienten, siendo unos animales extremadamente expresivos.
Varios de estos comportamientos, y a raíz del desconocimiento, resultan muy extraños y hasta aterradores para algunas personas. Pero dichos comportamientos son vitales para el entendimiento, así como para reconocer cuando algo va bien o mal con el peludo de la casa. Entre los diversos comportamientos existentes, conocer las 3 razones por las que tu perro te lleva sus juguetes podría darte más de una sorpresa.
Muestra de respeto
Para los perros la manada es lo más importante, y eso incluye al alfa de esta, que resulta ser por lo general la persona con la que más interactúa el can o la que más infunde respeto. Remontándose a sus ancestros, estos tenían la costumbre de llevarle comida u objetos al jefe como muestra de respeto, incluso como una forma de sumisión.
Este comportamiento perruno es una clara muestra de su respeto hacia la persona, así como el estar contento con su “mandato como alfa”.
Necesidad de atención y juego
Cuando su familia se va de la casa, en especial cuando se trata de la persona con la que más interactúa, el can se entristece y espera ansioso la llegada de alguno de los miembros de la manada. Algunas veces por exceso de energía y otras porque se ha sentido solo durante la expedición de sus humanos al mundo exterior.
En la parte más vinculada al juego, el perro usa esta táctica para que la persona entienda que desea jugar un rato con él, o por lo menos recibir un pequeño mimo. En estos casos por lo general la conducta se aprende con el tiempo y la interacción del día a día.
“Confío en ti’
Una de las formas más adorables de los perros de expresar su confianza y cariño es a través de llevarle el objeto más valioso de su colección a su compañero humano, objeto que usualmente se trata de su juguete favorito. Este comportamiento canino es bastante común en las relaciones sanas humano-perro y no tiene ninguna connotación negativa detrás
Independientemente de si se trata de un gesto de confianza, respeto, necesidad de atención o juego, este acto siempre simboliza un vínculo fuerte e importante para el can, por lo que unas caricias o juegos como retribución nunca están de más.
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