La acción de los grupos activistas ha logrado que se establezcan legislaciones para prohibir los espectáculos con animales salvajes, por lo que a partir de ahora los circos de New York no tendrán animales.
Desde que tenemos memoria los circos son famosos por sus espectáculos con animales salvajes como leones, elefantes, tigres a los cuales les hacen exhibir sus habilidades. Estos animales eran llevados de un sitio a otro en grandes jaulas a la espera de la hora del show.
Han pasado muchos años, y en algunos lugares del mundo aún los animales salvajes siguen formando parte de los espectáculos de los circos. En los últimos años la acción de los grupos activistas ha logrado que se creen legislaciones para que se aplique la protección hacia este tipo de animales salvajes para prohibir su participación en el repertorio de los circos.
Esta nueva medida, se conoce como ley 1233-A, parte desde una iniciativa que lleva muchos años promoviéndose, y que entrará en vigor en este nuevo año.
Muchos países, la mayoría pertenecientes a América del sur y Europa poseen legislaciones al respecto.
¿Por qué los circos de New York no tendrán animales?
- Están privados de su libertad. Pasan la mayor parte del tiempo en sus jaulas esperando a realizar los espectáculos, además están encadenados o atados, lo que les termina por causar lesiones.
- Son sometidos a un duro entrenamiento para potenciar sus habilidades. Los trucos que los animales realizan en los circos no son algo natural para ellos, son cosas que no hacen de forma natural cuando están en su hábitat, si lo pueden aprender, pero el proceso de aprendizaje les genera mucho estrés y nerviosismo, ya que tienen que dedicar a ello bastante tiempo.
- Son transportados constantemente. Se les lleva de un lado para otro hacinados en jaulas y en condiciones precarias. Estos viajes pueden durar días en los que están sin comer como deben y si la atención médica que necesitan.
- Pueden enfermar. El constante estrés, los viajes o los entrenamientos, son muchos de los factores que hacen que el animal pueda enfermarse, lesionarse e incluso llegar a perecer.
¿Los circos deberían dejar de existir?
Para nada, los circos son lugares mágicos donde pasarlo bien y reír, sitios donde descubrir cosas maravillosas y que todo el mundo debería ver. Pero donde podamos disfrutar de espectáculos sin maltrato animal, que un trapecista se dedique a ello aun con los riesgos que para su vida conlleva, es una decisión que toma libremente, un animal no puede decidir.
Desde luego, estamos encantados, por lo menos los circos de New York no tendrán animales, esperemos que muchas más ciudades se sumen y adopten esta legislación.
Disfrutemos de los espectáculos sin el sufrimiento de ningún ser vivo.